viernes, 17 de diciembre de 2010
Final de año.
viernes, 8 de octubre de 2010
El trabajo y el tiempo.
Para los que somos fans de Harry Potter ¿Quién no ha visto la escena y/o capitulo de la saga en donde Hermione utiliza un giratiempo para poder cursar más asignaturas que nadie en todo Hogwarts? Yo si y muchas veces se me ha ocurrido pensar que ese sería un método ideal para hacer muchas cosas que yo quisiera; pero desgraciadamente las personas solemos abusar de las libertades y privilegios que nos llegan a otorgar. Si tal artefacto mágico existiera, creo que muchos de nosotros lo utilizaríamos para arreglar errores cometidos en el pasado y seguramente desperdiciaríamos nuestra vida en ello. ¿Y para que sirven los errores? Obviamente para poder madurar y así aprender cosas nuevas.
¿A qué viene todo esto del giratiempo? Aparte de desear que ese objeto existiera, me gustaría encontrar una forma de poder estirar el poco tiempo libre que me queda para hacer todo aquello que me gustaría: tareas en la escuela, investigar, tomar clases de música, de inglés, hacer ejercicio, salir con mis amigos, con mi novio, con mi familia y por supuesto poder estar siempre pendiente de lo que ocurre en el foro. Esas son las principales cosas que muchas veces me lamento de no poder hacer por estar sentada diez horas diarias en el trabajo.
Yo se que en el ámbito laboral se obtienen muchas satisfacciones a nivel personal, profesional, económico, entre otros aspectos. Hace un año acudí a un congreso que organizaron en la Universidad acerca del Desarrollo Humano y elegí un taller que se llamaba “Manejo del estrés”; para los que me conocen saben que el estrés es parte de mi vida y de mi forma de ser, entonces pensé que ese taller sería lo ideal para mi. Desgraciadamente solo eran dos horas de plática y al final me quedé en la misma situación.
Una de las partes que mencionaba el profesor, era que siempre teníamos que ser puntuales en nuestros trabajos: tanto a la hora de entrada como la de la salida. Debo reconocer que eso me causó muchísima gracia ¿Cómo hacer eso? Si las veces que salgo tarde son por esperar a que otros terminen su trabajo o cuando todo lo piden en el último minuto. Desde ahí las cosas ya estaban mal ¿Entonces qué caso tenía seguir con lo demás? ¿Cómo aplicar los consejos que me daban, cuando son detalles que no dependen de mí?
Estuve mucho tiempo torturándome mientras se me ocurría la forma de controlar mi estrés y hace unos meses caí en la cuenta y tuve que hacer lo que un par de personas me venían aconsejando desde hace algún tiempo. “No te preocupes por la empresa, si a ti te pasa algo ellos fácilmente pueden reemplazarte. Preocúpate por ti y deja que los demás hagan lo que quieran”. No se si sea el mejor consejo, pero me ha servido de mucho; aunque tengo que reconocer que lloro muy seguido a causa de tanto estrés, creo que es la única manera que he encontrado para tranquilizarme un poco.
¿Qué hago en mi tiempo libre? La tarea (lo que me de tiempo de hacer), el foro (días en los que solo leo y otros cuando me pongo a escribir), mi novio (últimamente un par de horas cada dos o tres días), el médico (otro par de horas durante tres días a la semana… maldita terapia, pero todo sea por darle gusto a la familia) y la familia (el domingo). Todo lo demás… está negado para mí, por lo menos ahora.
Pero qué puedo hacer, me atrevo a pensar que no existe un buen trabajo donde paguen bien y por mucho menos tiempo. La situación económica está cada vez peor y debo considerarme afortunada, pues conozco a varias personas que tienen dos trabajos y todo para mantener a su familia. Solo me queda seguir adelante, esperando a que a alguien se le ocurra hacer que los días tengan 48 horas ó que la Ley obligue a trabajar menos tiempo. Yo se que no ocurrirá, pero soñar no cuesta nada ;)
Saludos.
miércoles, 29 de septiembre de 2010
Durante el viaje.
No he tenido tiempo para sentarme con calma a esperar que venga la inspiración. Es mi segunda entrada y ya estoy pensando en algún tema que quiera plasmar; en este momento voy de camino a casa, para disfrutar de la hora de comida y al terminar, me iré de nuevo al trabajo.
Me asomo por la ventana del autobús para ver que el agua que hace un par de días inundaban las calles de la ciudad, ya no está y en lugar de las nubes grises, ahora se encuentra totalmente soleado. Si alguien estuviera de visita en este momento y yo le platicara lo sucedido, seguro me diría que no puede ser posible; sin embargo, basta observar la maquinaria que se encuentra en este preciso instante sacando el agua estancada en una de las colonia que resultaron más afectadas por la inundación.
Una de las salidas para el malecón se encuentra cerrada, pues hubo un deslave y provoco que una parte de calle se socavara; dicen por ahí que después de la tempestad llega la calma y por ahora la naturaleza nos dio una tregua, la cual desgraciadamente durará muy poco. Está pronosticado otro mal tiempo, supuestamente es para el fin de semana, pero el aire comienza a soplar desde ahora; la lluvia continuara, aunque no será tan fuerte como en días pasados.
Pensé que no avanzaría mucho teniendo tanta distracción a mi alrededor, tal parece que se me da muy bien el encerrarme en mi mundo. Extrañé mis audífonos, los cuales olvidé en mi casa y por lo tanto no pude escuchar música en todo el día; las consecuencias de esto fueron desastrosas: me quedé dormida sobre el escritorio de la oficina, pero afortunadamente nadie se dio cuenta.
Alguien me preguntaba anoche para cuándo escribiría otra entrada, la respuesta está aquí y espero que te guste tanto como lo que escribí anoche. Prometo que cuando tenga más tiempo libre y no esté tan apurada como ahora, escribiré otra cosa mucho más interesante. Dejo esto hasta aquí, pues ya se me hizo bastante tarde.
Nos estamos leyendo.
martes, 28 de septiembre de 2010
Érase una vez…
Normalmente así inician las historias que nos contaban cuando éramos niños y por eso quise ponerle ese título a la primera entrada en mi blog, porque significa el principio de muchas cosas que me gustaría plasmar aquí. Espero poder tener el tiempo necesario para no abandonarlo, pues algunos saben que había querido abrirlo desde hace algún tiempo y por un motivo u otro, esta idea no se había podido concretar.
Quizás algunos se pregunten cuál fue el motivo por el cual elegí el día de hoy para la inauguración de mi blog. Debido a algunos acontecimientos que no explicaré aquí porque creo que no vale la pena recordar, he andado extremadamente sensible y justo en mi trabajo, cuando más estresada estaba, se me ocurrió el nombre que se puede leer claramente en el encabezado de esta página o bien, en el link.
Me pareció algo serio y a la vez un poco gracioso ponerle ese título ¿Porqué? Para los que me conocen a la perfección, saben que soy muy distraída y olvidadiza; cabe aclarar que soy un caso especial, porque me enorgullezco de tener una excelente memoria para recordar nombres, números, rostros y sin embargo, mi madre puede mandarme a comprar un kilo de limones para que al final llegue a mi casa con tomates.
Por si no quedó lo suficientemente claro, tengo pésima memoria para recordar acontecimientos ocurridos a corto y largo plazo; aún no he descubierto la causa y por eso agradecería enormemente a quien me ayude a descubrir ese misterio. Incluso me da la impresión de que algunas personas piensan que bromeo cuando me dicen cosas como: ¿Te acuerdas de aquella vez que…? Y yo solo me rio para contestar: “Mmm… no recuerdo ¿Estás segura de que estaba contigo esa vez?
Es por eso que elegí ese nombre, tan simple y a la vez tan significativo para mi; también he de reconocer que me encuentro un poco nerviosa por ser la primera vez que intento escribir y exponer mis ideas ante otras personas. Siempre me he considerado una persona bastante tímida y a la que le cuesta expresar sus opiniones, ya sea de forma oral o escrita; de todas maneras haré el intento con la esperanza de fracasar en este nuevo objetivo.
En este momento, miles de locas ideas cruzan por mi mente y me piden a gritos ser publicadas, pero por ahora solo lo dejaré hasta aquí. Esto solo es el inicio de un cuento que no sé hasta cuándo llegará a su fin; solo agradezco a las personas que se tomen su tiempo para poder leer y comentar este blog.
Hasta la próxima.